martes, marzo 25, 2008

“El ego no tiene que ser destruido”


* Conversaciones con el Maestro

El capítulo 5 del Libro de Texto de Un Curso de Milagros, que se refiere a “Curación y Plenitud” establece:

“Todos los pensamientos no-amorosos tienen que ser des-hechos, palabra ésta que el ego ni siquiera puede entender. Para el ego, deshacer significa destruir. El ego no será destruido porque forma parte de tu pensamiento, pero como no es creativo, y es, por consiguiente, incapaz de compartir, será reinterpretado de otra manera para así liberarte del miedo. La parte de la mente que le diste al ego regresará simplemente al Reino, donde a toda ella le corresponde estar”.

Esto significa que no se nos está pidiendo destruir al ego sino simplemente re-interpretarlo a la luz de la Verdad. Tu yo individual es necesario mientras el proceso de aprendizaje continúe. Eres tú quien elige, eres tú quien pone su voluntad en consonancia con la Voluntad Amorosa del Creador. Sin la participación de tu yo individual aquí en el mundo, es imposible que retornes a la cordura del Reino.

Eres el tomador de decisiones. De tu decisión depende lo que vives y, por consiguiente, lo que vivimos todos. Es importante entonces que elijas lo correcto, y la única manera que tienes para saber si estás decidiendo correctamente, mientras no vives tu verdadero Ser, es lo que estás experimentando en base a tu decisión.

Las elecciones correctas son aquellas que solamente pueden traernos paz. Y si estamos en paz, experimentamos dicha, y si nos sentimos dichosos estamos viviendo el amor. Las elecciones correctas, por tanto, son aquellas que se hacen desde lo amoroso y para lo amoroso.

En cada situación a la que te enfrentes, y en donde sientas que estás perdiendo tu paz –y tú sabes perfectamente cuándo la estás perdiendo- elige lo amoroso, y lo amoroso se manifestará en ti y a través de ti.

Esto es lo que significa des-hacer. No estás destruyendo nada. Simplemente estás arrojando luz donde estabas percibiendo oscuridad. Recuerda: la Luz es eterna, mientras que la oscuridad es sólo ausencia de luz. La primera es real, la segunda es aparente. Sin embargo, para quien elige poner su atención en las apariencias, en lugar de centrar sus afanes en la verdad, la oscuridad no solamente parece ser real sino que resulta inquebrantable.

Criatura de Luz, no es que la oscuridad sea inquebrantable, lo que sucede es que estás tratando de destruir algo que no existe. Estás poniendo tu voluntad y por lo tanto tus empeños al servicio de una ilusión óptica, de una percepción errónea, de un espejismo. Arroja luz sobre las tinieblas y te darás cuenta de que la luz siempre ha estado ahí.

Pero para que la luz llegue a tu conciencia es necesaria tu participación.

La verdadera curación es amorosa. De hecho, sanar es amar. ¿Cómo podría entonces lo amoroso exigir destrucción como prerrequisito para la salvación? Lo amoroso te pide simplemente que lo elijas, que pongas tu voluntad ahí y en nada más. Es sólo eso lo que debes hacer. Es sólo eso lo poco que se te pide para que puedas tomar conciencia de todo lo que tienes y de todo lo que eres.

Es importante entonces la participación de tu yo individual para que puedan llevarse a cabo los milagros. La Voluntad de lo Amoroso no puede actuar en contra de tu voluntad. Elige poner tu voluntad al servicio de lo Amoroso y la paz y el bienestar que buscas vendrán a ti por razón de lo que eres: el tomador de decisiones aquí en el mundo. Ese es tu poder aquí. En esto radica tu capacidad de recordar quién eres: una mente, mente que tiene el poder de decidir qué manifestar, mente que tiene la necesidad de tomar decisiones aquí en el mundo, pues en el Cielo no hay nada entre qué elegir.

Criatura de Luz, mientras camines por este mundo de apariencias, deberás elegir en dónde posar tu percepción. Elige ver la Luz y no podrás sino vivirla en ti y a través de ti. Elige la oscuridad, y el sufrimiento será lo que experimentes.

Elige. Pero tienes que ser tú quien lo haga. Nadie más puede hacerlo. Tu yo individual es necesario por un tiempo, mientras el tiempo se percibe correctamente. Por ello, no se te está pidiendo que destruyas tu ego, decirte esto sería tanto como decirle a un niño que necesita destruir al monstruo de sus pesadillas para que pueda volver a dormir en paz.

Despierta solamente. Date cuenta de que estás soñando. Date cuenta de que eres tú el soñador del sueño y que, por tanto, tienes la capacidad de elegir qué sueño soñar, o, mucho más aún, que puedes elegir dejar de soñar.

Elige poner a tu yo individual al servicio de lo Amoroso, al servicio de la Verdad, e incluso tu ego se volverá santo, tal como todas las cosas mundanas pueden volverse santas, pueden volverse amorosas, si así tú lo eliges. La diferencia está en el propósito que les confieres.

Pon a tu yo individual al servicio de la Verdad, que es perfecta y eterna y por lo tanto amorosa, y te liberarás del miedo. Continúa poniendo a tu yo individual al servicio de las apariencias, al servicio de tu cuerpo y de los demás cuerpos que te rodean, y no podrás sino atarte al sufrimiento de lo efímero, lo vulnerable y lo imperfecto.

Tú eliges. (Alma Delia Martínez Cobián bitacoralma@gmail.com)

* Si desea adentrarse más en estos temas liberadores, le invitamos a integrarse al Grupo de Prácticas Meditativas de Un Curso de Milagros, que inició este Lunes 24 de Marzo en La Escala, centro cultural para el desarrollo humano. Las prácticas son por las mañanas, de 10:15 a 11 am, los Lunes, Miércoles y Viernes, con una cooperación de $50 pesos semanales. Para mayores informes, puede llamar al 607 51 63 / 607 52 67.